En otoño es tiempo de nubes y lluvias, con algunos rayos de sol de vez en cuando, algo tímidos pero aún cálidos. Es tiempo de todo tipo de setas y hongos, de recoger manzanas, nueces y avellanas, de asar boniatos y castañas. Es tiempo de calabazas y de granadas. Es tiempo de retomar los platos de cuchara calentitos y reconfortantes. Es tiempo de preparar esta crema de otoño , rica, sencilla, muy suave, y que concentra todo el sabor del otoño.
Nunca me había gustado el otoño, la verdad es que me lo pasaba añorando al verano y mirando con desdén su cielo casi siempre gris. Pero ahora he aprendido a apreciarlo, porque es en otoño, bajo ese cielo gris, que el campo alcanza su máxima intensidad y variedad de color, y por todos los regalos que nos pone en la mesa.
En esta crema de otoño la manzana aligera la patata, y la granada le pone el toque dulce y de color. El resultado es una crema de textura muy sedosa y sabor suave y delicioso. Si tienes oportunidad de hacer unas setas a la plancha y añadirlas como guarnición a la crema justo antes de servir, tendrás un plato otoñal perfecto. ;-)
Lavamos y troceamos los puerros. En una cazuela calentamos el aceite y la mantequilla y sofreímos los puerros unos minutos. Mientras se sofríen los puerros pelamos las patatas, pelamos y descorazonamos las manzanas, y partimos ambas en dados. Los añadimos a la cazuela, salpimentamos y cocinamos 15 minutos a fuego medio. Pasamos las verduras al vaso de la batidora y trituramos hasta obtener una textura fina y homogénea. Servimos caliente decorando con un poco de perejil y unos granos de granada