Hoy ha comenzado el verano, hemos llegado al solsticio y la noche más corta del año. Y hemos preparado una coca de San Juan, una de las cocas más populares en Cataluña, que se come tradicionalmente para celebrar la revetlla de Sant Joan, la noche de San Juan, la noche del 23 al 24 de Junio.
La coca de San Juan es una coca fina, blandita y esponjosa que suele decorarse con piñones, fruta escarchada o crema catalana. Nosotros no le hemos puesto fruta escarchada porque no nos gusta mucho. He probado varias recetas para hacer esta coca de San Juan y la verdad es que ésta me parece la mejor, aunque no la más fácil. En primer lugar preparamos un fermento con un poco de leche, harina y levadura que tendremos que dejar que repose 1 hora. Luego elaboramos la masa principal a la que agregamos este fermento. Y esta masa principal tendrá 2 levados. Es un dulce laborioso, como todos los de este tipo de masa tipo brioche o roscón de Reyes, porque necesitan pre-fermento y varios levados. En total vas a necesitar unas 4 horas como mínimo para tenerlo listo. Es laborioso pero merece la pena porque es riquísima. Un consejo práctico es hacer la crema pastelera el día de antes, así estará mucho más sólida y nos será más fácil decorar la coca.
Con las cantidades de la receta te sale una coca grandecita o 2 medianas. La que ves en la foto es mediana. Si prevés que no vas a consumirla toda en poco tiempo te aconsejo que optes por partir en dos la masa tras el primer levado, haces una coca mediana con una parte, y congelas la otra. Porque este tipo de masa pierde y se endurece mucho con el tiempo. Lo ideal es comerla recién hecha y al día siguiente como mucho. Después seguirá rica pero necesitarás mojarla en leche o café, porque estará algo dura.
En Madrid no mucha hay tradición de celebrar San Juan, el 24 de Junio no es festivo, y la mayoría de la gente no hace nada especial. Pero en Tarragona, tierra natal de Raúl, como en el resto de Cataluña y en muchas otras regiones de España es una fiesta muy popular, la gente se reúne, se encienden hogueras, hay fuegos artificiales, y en definitiva se celebra la llegada del verano.
No cabe duda de que las celebraciones actuales tienen una conexión directa con las celebraciones de la antigüedad ligadas al solsticio de verano, influidas por ritos paganos vinculados a los ciclos de la naturaleza. En cualquier caso la llegada del verano es un buen motivo para celebrar y comernos un pedacito de esta coca ;-)